Letargo | Poesia

Atosigado en suspiros

mi espíritu ansía calma,

mas no puedo dejar en vilo

el dolor que en profundo arraiga.

Nacido de un amanecer

truncado en un cielo pardo,

resabio de unos ojos tristes,

tranquilos y aletargados.

Y si la vida acaso

tengo pendiente de un hilo,

he de decirte, Dios mio,

que prefiero me lo cortes,

antes que dejar que el rencor

se anide en mi ser y mi alma,

pues ni él merece tal hecho,

ni yo merezco tal ancla.


                    A. Martínez




Comentarios

  1. Como puedo yo decirte lo equivocado que esta el mundo, tan perdido en detalles efímeros e intrascendentes. Como puedo yo no valorar una sonrisa, una mirada honesta, una palabra de agradecimiento o una voz que canta alegrías frente al desconsuelo. Como puedo yo olvidar si quiera esa vez que recibí un abrazo, una palabra de aliento cuando más la necesitaba, la amabilidad de un extraño que me veía como su hermano. Como puedo yo no hablar de mi corazón, lo único verdadero frente a la ilusión que busca apagarme día a día. Como puedo yo decirte lo mucho que te amo, que no espero nada de ti como para que tu te tortures de tal manera, eres invaluable. Estábamos tan perdidos y era natural pecar, creíamos que no había consecuencias y el aprendizaje fue muy duro y sufrido. Pero ya es hora de tomar la responsabilidad, escuchar la voz que grita en tu interior, callar un poco el ruido de los pensamientos para escuchar.

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